BAHIA SAN BLAS – PCIA. DE BUENOS AIRES -PARTE I : HISTORIA DE AVENTUREROS

El viento corre en esta semana de Enero y de a poco va tapando con arena los caminos. Una mezcla de pampa descolorida y una pizca de región patagónica con aires de desolación pasa frente a mis ojos. Isla Jabalí, para ese rumbo trota la camioneta entre serruchos molestos y vientos que forcejean la dirección. Pero nada me detendrá.

La historia parece comenzar por los años 30 con la familia Wassermann, pero la verdadera historia comienza mucho, mucho antes y con muy pocos rastros para hilar. Mi destino no fue un capricho, sino un tema pendiente por descubrir, que desde hace muchos años el nombre San Blas corre por las venas familiares.

En estos lugares difíciles para emprender proyectos viables, donde la llegada de los ferrocarriles hasta Stroeder, Jose B Casas, Cardenal Cagliero constituían un esfuerzo titánico, donde los aires de grandeza y pujanza de un país con producción a pleno se fue apagando , uno, sin embargo se sigue maravillando del esplendor y lo conservado que su gente mantiene su historia. A esa historia de los años 1800 hasta principio del 1900 es la que quiero contar, la que queda muy poco en pie y solo buscando y buscando en viejos libros arrumbados y algunos en la biblioteca familiar, surgen datos tirados como al azar.

Si hacemos un pequeño pasaje de historias de aventureros, se destaca el paso del capitán Fitz Roy y junto a el, él inseparable naturalista ingles Charles Darwin, quien deja los primeros detalles cartográficos muy precisos para la época. De alli podemos pasar al emprendedor irlandés Mulhall quien fuera dueño de las tierras de la Isla Jabali que luego las entrega a los Wassermann en parte de pago. De la mano de esta vieja época se encuentra todavía bien parado y reciclado el viejo Hotel Hernandez, dentro del cual hay algunos cuadros de las actividades de la época, de acopio de producción para ser enviadas a Buenos Aires. Frente al hotel, y solo por boca de otros pobladores, se encontraba un “ramos Generales” que deduzco que, es allí justamente donde mi bisabuelo trabajaba. Hoy hay una construcción moderna.

Tambien Las salinas Las Piedras y del Ingles fueron estudiadas en detalle por el Geólogo Lutz Witte bajo la dirección del Dr. Santiago Roth en el año 1916, de la mano de la Universidad de La Plata, y con la colaboración de mi bisabuelo Tobías Büchele quien vivio en San Blan unos cuantos años. En 1903 comienza a trabajar la compañía salinera Anglo Argentina que traía la sal en estado líquido por cañerías llegando a un lado de lo que hoy es el paso del puente carretero que une la isla con el continente.

Asi también los estudios fueron para los suelos ricos en canto rodado de la costa norte de la Isla Jabalí que luego surgieron las explotaciones con destino a la construcción de la base naval de Puerto Belgrano.

Ya en el 1902 trae estos emprendimientos el establecimiento de las oficinas de correo y el telégrafo, y desde aquí el pie inicial de este siglo para el desarrollo de esta isla. Si bien los altibajos de la producción de sal y canto rodado tuvieron su fin, dejo huellas para que otros aventureros observen y quieran instalarse en la zona. Es asi como la historia mas actual de la familia Wassermann tiene su sello particular y quedo plasmada en folletos, estancias, iglesia y muchas historias que entrelazan Buenos Aires con este paraje tan particular. Esa historia, mas reciente es la que el visitante que llega por primera vez a Bahia San Blas la podrá encontrar, pero la anterior deberá descubrirla, de a poco, curioseando viejas hojas amarillas que merecen mas relevancia, pues otorgo las bases fundacionales de la región.

Hasta aquí, un poco de historia. En el próximo relato estará plasmada la belleza actual del paraíso de la pesca y mas adelante el pueblo de Stroeder, otra perla en el camino.